La determinación oficial fue publicada este miércoles 25 de diciembre tras el naufragio de las negociaciones entre las cámaras empresariales y los gremios. Como ocurre desde la llegada del ultraderechista Javier Milei a la Presidencia de la Nación, el rol de intermediación del Gobierno en la mesa de discusión salarial se limita a observar cómo las patronales ofrecen incrementos ínfimos que son inmediatamente rechazados para luego, intervenir dictaminando a cuánto llegará el Salario Mínimo, Vital y Móvil de los trabajadores.
De esta manera, en diciembre el piso de ingreso para quien cumple una jornada de trabajo será de 279.718 pesos lejos de los 439.240 pesos para cubrir la Canasta Básica Alimentaria de las familias argentinas. En tanto, el SMVM llegará a los 296.832 pesos recién en marzo de 2025.
Lo que se discutió en la Secretaría de Trabajo de la Nación fue un aumento escalonado que llevaría el salario mínimo de $278.000 a $295.000 en marzo de 2025, es decir, un incremento total del 6 por ciento, ofrecido por las empresas. Por su parte, los sindicatos, incluyendo a la CGT y las dos CTA, coincidieron en exigir un monto inicial de 572.000 pesos.
Es de recordar que a los 11 días del corriente mes, el Instituto de Estadísticas y Censos (INDEC) reveló que la inflación de noviembre llegó al 2,4 por ciento y que la Canasta Básica Total, para una familia de 4 integrantes, trepó a 1.001.466 pesos sin contar el precio de los alquileres para vivienda.
A la baja interanual.-
Más allá de que el crecimiento de los salarios superó a la inflación en los últimos meses de 2024, el nivel de los mismos aún no supera el que registraron en noviembre del año pasado. De acuerdo al centro de investigación de políticas públicas Fundación Libertad y Progreso, en el punto más bajo alcanzando en marzo, los salarios reales repuntaron un 15,1 por ciento, aunque aún se encuentran un 3,9 por ciento por debajo del nivel de noviembre del 2023.