La ola de violencia armada que azota a la ciudad más grande del sur provincial sumó otro capítulo. A las 2 de la mañana de este domingo, al menos una persona que pasaba por Cabal 1300 bis y pasaje San José del barrio Empalme Graneros de Rosario, extrajo un arma de grueso calibre y disparó contra los vecinos que se encontraban en la vereda tras un día de extremo calor.
El ataque resultó ser mortífero ya que las balas segaron la vida de Máximo Jeréz de 11 años. Además, la brutal acción también dejó herida a una niña de 2 años y a dos adolescentes de 13 años. Uno de estos últimos, recibió un disparo en el pecho y debió ser intervenido quirúrgicamente según informaron desde el Hospital de Niños de Zona Norte.
De acuerdo a la primera reconstrucción de los hechos, el o los pistoleros se escabulleron por los improvisados pasillos de la popular barriada y lograron evadir a la policía escapándose por los techos. En un operativo de requisas ordenado por la Fiscalía y ejecutado por las fuerzas de seguridad se encontraron armas con numeración suprimida, ametralladoras y silenciadores que habrían sido dejadas atrás por los sospechosos.
En tanto, el fiscal que entiende en el caso, Adrián Spelta, ordenó que la recolección de testimonios a las personas que podrían haber presenciado el hecho, toma de fotografías, croquis del lugar, levantamiento de rastros. Asimismo, mandó que las vainas servidas secuestradas en el lugar fueran peritadas.
Cabe resaltar que esta madrugada fue sangrientas en otros puntos de dicha ciudad. En la Zona Oeste de la metrópolis un joven de 24 años fue asesinado a balazos. Su cuerpo fue hallado por las fuerzas de seguridad en la intersección de Campbell y Cisneros. Presentaba múltiples impactos de balas distribuidos en la espalda, piernas y cráneo.
