En la noche de este domingo se dio el segundo debate de candidatos presidenciales y uno de los ejes a tratar fue el de seguridad. Cuando la aspirante de Juntos por el Cambio y ex ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, hacía su disertación hubo un pedido de réplica. Lo había reclamado el candidato de Unión por la Patria, Sergio Massa, quien hizo un fuerte contrapunto en torno a la situación que vive la ciudad de Rosario.
«En el año 2017, y que la ciudadanía lo revise, Bullrich eliminó los inhibidores de señal en Rosario”, lanzó el también titular de Economía de la Nación. El dardo fue certero teniendo en cuenta que los inhibidores de señal para las cárceles son parte de las promesas de campaña de JxC. Los instrumentos de bloqueo de señales de telefonía son de mayúscula importancia para prevenir que crímenes y hechos de violencia armada que azotan a la metrópolis del sur provincial se coordinen de forma intramuro.
En efecto, surge de un archivo periodístico la denuncia que en su momento hiciera el entonces secretario de Asuntos Penitenciarios del Ministerio de Seguridad santafesino, Pablo Cococcioni. «Teníamos 5 inhibidores en funcionamiento para los internos de alto perfil hasta que el Enacom del Gobierno nacional nos desactivó los inhibidores argumentando que los aparatos perjudicaban a un prestador de servicios», expuso el funcionario que pica en punta para ser el titular de la cartera en la Gobernación de Maximiliano Pullaro.
Más paradójico se torna el caso cuando se piensa que el mismo Pullaro que durante su tiempo como ministro de Seguridad del Frente Progresista debió sufrir este tipo de intromisiones ahora apoye las líneas programáticas de Bullrich de cara a la presidencia de la Nación.