A pesar de haberse impuesto con actitud, el primer tiempo de Unión fue malo y no aprovechó lo que tenía enfrente: Un Defensa y Justicia con una formación alternativa de jugadores sin experiencia y tan sólo dos titulares. El dueño del 15 de Abril no generó peligro, empujó pero no pudo y estuvo abarrotado de errores en el ataque.
Así fueron primando las individualidades como fueron las asonadas de Enzo Roldán que terminaron en disparos desviados del arco de Enrique Bologna. En cambio, Defensa le devolvió la cortesía y a los 16 minutos Andreas Ríos chutó de media vuelta poniendo a prueba la seguridad del golero tatengue, Sebastián Moyano. La iniciativa del juego pertenecía al Halcón de Varela y en esa tónica pero sin demasiado fútbol en todo el campo, se fue la primera mitad del cotejo.
Ya en el complemento, los dirigidos por Cristian «Kily» González comenzaron a avanzar en el campo de la visita, arrimándose a la valla de Bologna que, por ejemplo, tuvo que despejar un remate de Mateo Del Blanco. A pesar de situaciones como estas, Unión pululó mucho en ese área pero le faltaba contundencia para abrir el marcador. En esas vueltas, Luna Diale terminó en el piso y terminó amonetado ya que el árbitro Ariel Penel creyó que simulaba. Pero la revisión del VAR marcó penal para el Tate.
A quien le habían cometido la falta le tocó patear y pudo capitalizar la oportunidad poniendo el 1 a 0 a los 28 minutos. La cachetada hizo que Defensa empezara a salir de su arco y a posicionarse cerca del de Moyano aunque sin situaciones inquietantes.
A los 47 minutos, el juvenil Jerónimo Dómina presionó, robó una pelota en el área del Halcón, se metió hacia el medio y chutó fuerte y arriba en el arco de Bologna que nada pudo hacer para evitar una nueva caída de su valla.
La victoria dejó los 3 puntos en la Avenida y el ánimo fortalecido para encarar la Copa de la Liga. Además se salió del pantano de los empates y se logró una alegría con González en la dirección.