Tras la denuncia mediática de desfinanciamiento del Laboratorio Industrial Farmacéutico, la directora Analía San Romań aseguró que no existe «desabastecimiento de medicamentos» aunque admitió que la entidad estatal atraviesa una «situación compleja por la realidad financiera nacional y la inflación». Los trabajadores representados por ATE y UPCN publicaron una carta abierta dirigida a la ministra de Salud, Sonia Martorano, reclamando que «garantice las entregas de las partidas mensuales solicitadas por el LIF en término y de forma completa hasta diciembre» o habrá medidas de fuerza.
«hay una situación compleja por la realidad financiera nacional y la inflación»
Analía San Román
En tanto, la funcionaria del laboratorio aseveró que los trabajadores percibieron sus salarios el pasado viernes, en fecha. «No hubo una demora ni atraso en los pagos, tuvimos un inconveniente. Habitualmente siempre tenemos la disponibilidad antes del último día, pero la situación financiera es complicada», le comentó a UNO.
Sobre las responsabilidades con los proveedores, San Romań aseveró que «siguen mandando los insumos porque confían en el LIF y saben la experiencia de que todos los años se ha cumplido, y en este caso también va a ser así». En tal sentido, indicó que también en ese eslabón comercial «hay inconvenientes». La directora sostuvo: «Somos muy conscientes y responsables de las deudas que vamos tomando, y los compromisos que tenemos los vamos a cumplir».
Por último, expresó que «el LIF se sigue produciendo. Estos últimos años cuatro hemos tenido un ritmo muy vertiginoso, se hicieron muchas obras, tuvimos récord productivo del año pasado, es un ritmo de trabajo muy acelerado. Ahora este es un año más tranquilo, pero nada que no se pueda resolver».
No obstante, advirtió que «tantas especialidades nuevas no van a salir», ya que «hay cuestiones que la misma inflación te lleva a que no inicies tantos proyectos nuevos, porque después la ejecución no es tan simple».
Por su parte, en la misiva referida, los empleados del Laboratorio habían manifestado su preocupación por el «desabastecimiento de los fondos necesarios para el correcto funcionamiento«. Además, apuntaron: «Durante estos meses hemos hechos los reclamos correspondientes por la falta de fondos, ya sea por medio de los gremios que nos nuclean o de forma directa a nuestro directorio o al ministerio de Salud sin tener una respuesta satisfactoria. Pero hoy hemos llegado a un punto donde nuestras labores diarias se ven comprometidas por este hecho, que genera deudas con proveedores y compañeros, como así también falta de insumos y de mantenimiento de maquinarias necesarias para el desarrollo normal y tan importante de nuestra actividad, como es la de producir y entregar medicamentos de uso públicos».