Este martes, como estaba anunciado, el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) reveló el IPC del mes de julio y se fueron por tierra las proyecciones de las consultoras privadas que esperaban un punto porcentual más: La inflación fue de 6,3 por ciento luego de una corta seguidilla de desaceleración. El dato llega luego de la derrota electoral sufrida por Unión por la Patria en las PASO nacionales de este domingo y la fuerte devaluación de este lunes que llevó el dólar oficial a 365 pesos mientras el blue trepó otros 40 pesos llegando a 725 pesos.
En el tramo interanual, es decir, a comparación con el mismo mes de 2022, fue del 113,4 por ciento y en el acumulado del año llegó al 60,2 por ciento. Este ultimo dígito era el proyectado por el Gobierno de Alberto Fernández para todo el 2023.
Los rubros que más se encarecieron fueron Comunicación con 12,2 por ciento a caballo de la libertad que las empresas de telecomunicaciones ostentan para establecer precios con ayuda de cautelares judiciales. Le siguió Recreación y cultura con 11,2 por ciento; Bebidas alcohólicas y tabaco 9; Salud con el mismo guarismo; Restaurantes y Hoteles con 7,5 por ciento dada la época de vacaciones de invierno. En tanto, la categoría Alimentos y Bebidas trepó por debajo del índice general y midió 5,8 por ciento. Fue la que más incidencia tuvo en todas las regiones del país y fue impulsada por encarecimientos en el pan y las carnes.
Las dos divisiones que registraron las menores variaciones en julio fueron Vivienda, agua, electricidad, gas y otros
combustibles 4,0 por ciento y Prendas de vestir y calzado 3 por ciento.