en una entrevista otorgada a Alejandro Fantino, el vencedor de las elecciones del pasado domingo, el ultraderechista Javier Milei, explicitó su agenda de acciones en caso de llegar a la Casa Rosada tras las elecciones generales y un posible ballotage que se abre ante el escenario de tercios. En primera instancia, el economista expresó que es «un error» considerar que «la gente está enojada y votó con bronca”.
“Cuando vos tenés niveles de ausentismo como el que han mostrado en las elecciones, si le sumás que el movimiento al que vos tanto desprecio sentís porque cuestiona el status quo, sale primero… Me parece que tenés que revisar el modelo”, espetó.
En otro momento pasó a hablar de su «Plan Motosierra» con el que piensa recortar el gasto fiscal para llegar al «déficit cero». En primera instancia aseguró con pagará la deuda externa con el Fondo Monetario Internacional a través de la dolarización. «El FMI no debería tener problemas con el programa que planteamos que es un ajuste fiscal mucho más profundo que el que ellos plantean. Lo más importante es la convicción. Tenemos claro el diagnóstico«, señaló el neoliberal.
En la misma línea anticipó sin demasiado reparo que eliminará las retenciones al campo y aventuró una máxima de campaña: «Proponemos que el ajuste lo pague la política».
La obra pública, en tanto, dejaría de ser facultad del Estado para pasar a estar en manos de privados como ocurrió en Chile hasta hace algunos años. «Un régimen de iniciativa privada a la chilena donde el riesgo es asumido por los empresarios y la obra es pagada por los usuarios», sintetizó y amplió que «si el contrato es BOT, se arma un esquema financiero para facilitar el financiamiento, ya que esa obra pasará al Estado». A su vez -continuó- «el proponente, luego de lograr la declaración de interés público, se ingresa a un proceso de licitación. En el mismo puede perder (recibirá pago por estudios hechos) y en dicha licitación se limpia los efectos de la corrupción».
Por otro lado, aseveró querer «devolverle la autonomía a las provincias» a través de la eliminación del sistema de coparticipación federal. En cambio habló de un sistema de administración de los recursos con base en los ingresos recaudados para repartir en los distritos. “Gastás en función de lo que recaudás”, definió.
De la misma forma, sin pruritos, aseguró que avanzará en la privatización de las empresas públicas. «A Aerolíneas Argentinas le doy un año de working capital y después queda para los empleados”, disparó y fue a por los servicios básicos: «El gas y el agua tienen que volver a manos privadas».
En cuanto a YPF, Milei fue claro: «Sigo pensando en la privatización de YPF, igual eso va a durar un tiempo”, aclaró. Según el candidato presidencial, el procedimiento para esa transición a una eventual privatización de la empresa petrolera del Estado será paulatino. “Vamos a usar YPF mientras que la reconstruimos y el caso de ENARSA para mejorar la transición para limpiar el desastre que hicieron los kirchneristas estos últimos 20 años”, expresó.
Plesbicito para la Ley de IVE.-
Para el candidato de la Libertad Avanza la ley 27.610 salida del Congreso de la Nación en 2021 «va en contra de la vida». En el mismo sentido opinó que el aborto «es un homicidio agravado por el vínculo» y que «no es un derecho ganado». Para revertir el estado legal de la norma, anticipó que impulsará un plesbicito y si la negativa surge de esa herramienta «eliminaría la ley».
«Si los argentinos creen en el asesinato de un humano indefenso en el vientre de la madre, se verá», resaltó.
«¿Cómo puede ser un derecho ganado matar un ser humano? Soy militante del pañuelo celeste y mi posición la baso en una cuestión filosófica, biológica y matemática», añadió y fustigó: «Cuando uno construye sobre un principio moral incorrecto, el resultado es inmundo».