Atrapados en negociaciones permanente, a instancias del complicado contexto que plantea la economía nacional conducida por el Gobierno de extrema derecha de Javier Milei, la administración de Maximiliano Pullaro hace números para estirar lapsos y evitar el alto nivel de desgaste en las partes. Con el objetivo de encontrar consensos antes de que finalice abril, el ministro de Educación de la Provincia, José Goity, dejó ver que la Casa Gris quiere romper la dinámica de paritarias mensuales.
«Se están haciendo todos los cálculos y las proyecciones en el Ministerio de Economía, nosotros desearíamos que fuera algún acuerdo un poco más largo y vamos a tratar de consensuar algún acuerdo que no sea exclusivamente por un mes», expuso el funcionario. Amen de este, señaló que las convocatorias para definir los aumentos de abril a docentes, empleados y médicos aún no tienen fecha. Con ATE y UPCN las charlas pasaron a un cuarto intermedio, dado que el Gobierno no pudo realizar una oferta salarial y espera que los días finales del mes inflen un poco las arcas provinciales en materia de recaudación y así poder esbozar una cifra.
En tanto, se avecina la discusión con Amsafé y Sadop, horizonte que se perfila un poco más complicado. Es que, días atrás, el propio Goity junto a su par de Economía, Pablo Olivares, presentaron un sistema de premios para los docentes que no hagan uso de sus licencias por enfermedad o cuidado de familiares a cargo. Por su parte, la representación de los trabajadores realizó un pedido ante el Ministerio de Trabajo para que se dé de baja la iniciativa por considerar que atenta contra el ámbito paritario y que «niega el derecho a enfermarse» que tienen los docentes.
A esto, Goity respondió que se trata de un «incentivo» y que «no es un tema salarial» por lo que «no es de competencia paritaria». Con esto, defendió la senada tomada por el Gobierno de Unidos para Cambiar Santa Fe, endureciendo también su postura. Vale destacar que el pago de estos premios mensuales y trimestrales insumirá cerca de 1800 millones de pesos al mes a una administración que asegura no tener recursos para mejorar los ofrecimientos oficiales en las paritarias.