El repudio llegó tras el anuncio del ministro israelí de Defensa, Yoav Gallant, de imponer un «asedio total» sobre la población palestina cortando la provisión de gas, agua y fluido eléctrico como respuesta a los ataques que los terroristas de Hamas efectuaron el pasado sábado. «La imposición de asedios que ponen en peligro la vida de civiles al privarlos de bienes esenciales para su supervivencia está prohibida por el derecho internacional humanitario«, expresó el Alto Comisionado para los Derechos Humanos de la ONU, Volker Turk.
En sintonía, la misión diplomática envió un correo a periodistas para subrayar que este asedio se produce después de «una masacre sin precedentes de israelíes inocentes y que Israel tiene derecho a defenderse». Desde el Gobierno de Netanyahu lamentaron que la ONU no declarase a los ataques de Hamas como «terrorismo».
Por su parte, Turk subrayó que «toda restricción a la circulación de personas y bienes con vistas a un asedio debe justificarse por necesidades militares. Si no, puede constituir un castigo colectivo». En la misma línea, confesó estar «profundamente consternado e indignado por los reportes de ejecuciones sumarias de civiles y en algunos casos de masacres horribles perpetradas por miembros de grupos armados palestinos». Según confirmó la agencia AFP, Türk les pidió a esos grupos «liberar de inmediato y sin condiciones a todos los civiles capturados».
Según comprobó la agencia AFP, los milicianos de Hamas que penetraron el territorio israelí salieron de Gaza y su ofensiva provocó al menos 900 muertos en Israel. La respuesta militar israelí causó al menos 765 muertos en Gaza.
Además de las víctimas fatales, los ataques israelíes obligaron a que más de 187.500 personas tengan que desplazarse dentro de la Franja de Gaza, según indicó la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA). A raíz de los acontecimientos despiadados, la Organización Mundial de la Salud (OMS) pidió la apertura de un corredor humanitario hacia la Franja.
En tanto, la comisión de investigación permanente de la ONU sobre las violaciones de los derechos humanos en los Territorios Palestinos e Israel constató que desde el inicio de la ofensiva de Hamas el pasado sábado, se dieron «crímenes de guerra cometidos por ambas partes».